La falta de este personal está estrangulando y colapsando la gestión educativa en las nueve provincias de la Comunidad
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios exige a la Junta que cubra las 379 plazas vacantes de administración de las direcciones provinciales de Educación y de los centros escolares de Castilla y León, que están estrangulando y colapsando la gestión educativa de las nueve provincias. Esas vacantes suponen el 30% de la plantilla total (1.251 auxiliares y administrativos).
Las vacantes en las direcciones provinciales suman 162, el 28% de los 575 puestos incluidos en las Relaciones de Puestos de Trabajo (RPT); y en los centros educativos 217, lo que significa que el 47,2% de las plazas están sin ocupar.
No hay que olvidar que las direcciones provinciales de Educación son las entidades que están al servicio de los centros educativos, a los que dan el imprescindible apoyo en todo lo relacionado con la gestión de personal, becas, transporte, obras, reformas, reparaciones o suministros de material.
La tendencia que aplica la Junta es la de no cubrir los puestos que quedan vacantes en administración, de auxiliares mayoritariamente, para amortizarlos "directamente", argumentando que "su tarea fundamental es la de pasar a máquina escritos, y que eso pueden hacerlo los técnicos".
La consecuencia ha sido un comienzo de curso especialmente problemático. Más de un millar de docentes no han cobrado la nómina en septiembre a tiempo en algunas provincias. Además, se producen colapsos en las diferentes tramitaciones unida al enorme volumen de burocracia reinante en todas las direcciones provinciales; así como enredos constantes en los interminables nombramientos, tomas de posesión o ceses que se producen, muy especialmente en el inicio del curso, pero también a lo largo de todo el año, en parte derivado de la elevada temporalidad reinante en el personal docente. En definitiva, lo sufren el sistema educativo público "incrementando la ya excesiva carga burocrática que asumen nuestros docentes por un lado y los alumnos como destinatarios de la educación pública por otro".
El sindicato independiente manifiesta que la línea que separa las funciones de un auxiliar administrativo y de un administrativo "es extremadamente delgada, ocurriendo que el personal auxiliar hace exactamente las mismas funciones que el administrativo, cuando falta personal".
"¿Y la Junta qué hace?", se pregunta CSIF, que responde "desvestir a un santo para vestir a otro", en alusión al envío temporal de auxiliares de un centro a otro, que se hace en ocasiones "para 'salvar el bache' durante unos días". Una práctica con la que se pretende maquillar el problema real, que es la carencia de personal.
Las vacantes de los puestos de administración en las direcciones provinciales de Educación son 14 plazas en Ávila (el 27% de la plantilla), 15 en Burgos (20%), 33 en León (35%), 15 en Palencia (30%), 28 en Salamanca (35%), 12 en Segovia (25%), 9 en Soria (22%), 26 en Valladolid (28%) y 10 en Zamora (20%).
En el caso de los centros educativos, los puestos de administración que no están cubiertos son 25 en Ávila (el 56% de la plantilla), 35 en Burgos (38%), 43 en León (31%), 11 en Palencia (23%), 22 en Salamanca (24%), 11 en Segovia (25%, 13 en Soria (29%), 26 en Valladolid (24%), y 31 en Zamora (39%).