Se recibía una llamada en la sala del centro de emergencias 1-1-2 Castilla y León que informaba de un incidente en una vivienda situada en el número 26 de la calle Gregorio Solabarrieta, en Miranda de Ebro (Burgos), donde una mujer de 42 años había perdido el conocimiento.
La sala de operaciones del 1-1-2 daba aviso del incidente a Emergencias Sanitarias - Sacyl, que envíaba una UVI móvil. Al llegar, Sacyl comunicaba al 1-1-2 que podría tratarse de una intoxicación por monóxido de carbono y eran cuatro las personas afectadas.
Se informaba a la Policía Local de Miranda de Ebro, al Cuerpo Nacional de Policía, a los Bomberos de Miranda de Ebro y a las empresas suministradoras de gas.
En el lugar, el personal de Sacyl atendía a una mujer de 42 años y una niña de 10 que eran trasladadas en UVI móvil al Hospital Santiago Apóstol de Miranda de Ebro y a un varón de 39 años y a un niño de 15 que eran evacuados por la policía local al mismo centro asistencial.
Durante el seguimiento del incidente, los bomberos y las empresas de suministradoras de gas informaban que la intoxicación se había producido por la mala instalación de un calentador de butano.