Las zonas comunes de un portal pueden ser grandes focos de contagio, por eso es importante tomar las precauciones necesarias para evitarlo. Cuando se accede al domicilio hay ciertas medidas que se han de tener en cuenta
Lo primero que hay que tener en cuenta es que elementos como el pulsador, el pasador o los botones son puntos de riesgo. Una opción siempre puede ser subir al domicilio por las escaleras, pero en caso de usar el ascensor recurre a unos guantes u objetos a mano, como las llaves, para pulsar cualquiera de estos focos.
También es posible que esté ocupado por algún vecino, úsalo siempre que puedas estar solo en el espacio, ya que no se puede mantener la distancia mínima frente al posible contagio (un metro). En caso de que sea un ascensor amplio, es recomendable que siempre esté a un máximo de un tercio de su ocupación.
Si te decantas por las escaleras, una opción más saludable, no toques la barandilla, también supone un gran foco de contagio, puedes agarrarlo únicamente si utilizas guantes y recuerda siempre no tocarte la cara.
Es muy probable que algún vecino recurra a subir al piso andando. En ese caso mantén una distancia mínima de cuatro escalones.
Para prevenir contagios hay que tener cuidado en la puerta de acceso a la comunidad. Es necesario el uso de guantes y en caso de necesitar refuerzos, utilizar el codo para mantener abierta la puerta.
Al llegar a tu domicilio particular, recuerda lavarte las manos durante 20 segundos con jabón. No te olvides de las uñas, muñeca o la parte interna entre los dedos.
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