Con meses de retraso la Consejería de Educación publicó a finales del mes de noviembre el nuevo temario que el profesorado de Lengua y Literatura de nuestra comunidad tiene que impartir en 2º de Bachillerato para el examen de la PAU
Este temario contempla nada menos que 16 obras literarias de obligada lectura y estudio, lo que contrasta con las 4 obras exigidas en otras Comunidades Autónomas y genera un más que evidente agravio comparativo para nuestro alumnado.
El hecho, en primer lugar, de que no se haya contado para la elaboración de este nuevo temario con profesorado de Educación Secundaria, y, en segundo lugar, el hecho de que los coordinadores universitarios tampoco conozcan quién o quiénes lo han elaborado, hace pensar a este sindicato que el nuevo temario sea obra de alguna mente lúcida de la Consejería que desconoce la realidad educativa regional y estatal y que todavía no ha dado explicaciones sobre esta situación.
Llama la atención la falta de sensibilidad y empatía hacia estos jóvenes, que tendrán que redoblar esfuerzos para acometer el estudio de dichas obras en un año académico especialmente dramático por el cambio en el modelo de examen, al implantarse el cambio legislativo que conlleva la nueva ley LOMLOE. Así mismo, sorprende la ausencia casi total de mujeres escritoras (tan solo Emilia Pardo Bazán) y de escritores latinoamericanos, lo que denota el sesgo ultra del gobierno de Mañueco, en el que se aprecia la influencia dejada por sus exsocios de gobierno.
El sindicato entiende que las protestas estudiantiles durante el primer trimestre motivaron las prisas en la elaboración y la publicación de los temas, con el curso ya avanzado y sin que el profesorado supiera los nuevos criterios con que debía programar su trabajo.
A pesar de las protestas y denuncias de docentes y alumnado, que han hecho pública esta situación en la prensa local, las autoridades educativas ni han rectificado ni han mostrado voluntad de rectificar estas disposiciones tan evidentemente discriminatorias y perjudiciales.
Desde CGT denuncian la desconsideración y la falta de respeto sistemáticas de la Consejería de Educación tanto hacia la labor docente como hacia el propio alumnado de nuestra Comunidad, desconsideración y falta de respeto que se hacen patentes por el retraso en la publicación de las normativas educativas necesarias para una educación de calidad, algo viene siendo tan habitual en estos últimos cursos.